La primavera la sangre altera. Y la piel también.

Es una época que va acompañada de muchos cambios. Los que todos conocemos, el aumento de la temperatura, de las horas de sol, aparecen las primeras alergias…

Y de los que nos somos tan conscientes como los hormonales. Pero todo tiene un impacto sobre nuestra piel, que sufre (mucho) durante esta época.

Es común que empeore (sobre todo las pieles más sensibles), y que algunos problemas como el acné, la rosacea o las dermatitis se acentúen y vayan a peor.

¿Qué es lo qué más sufre nuestra piel?

Estos cambio bruscos de temperatura y humedad. Hoy 30°. Mañana 12°. Hoy hace un sol tremendo y mañana no se hace ni de día. Estos cambios machacan nuestra piel.

Durante la primavera, hay más humedad que en invierno, por lo que los niveles de hidratación van a aumentar y van a mejorar la barrera cutánea, pero por el contrario, también suben las temperaturas, aumentando así las secreciones sebáceas y la dilatación de los poros. Menudo lío.

Los PROS y CONTRAS de la primavera en la piel :

El aumento de las horas de sol será un contra para nuestra piel, ya que nuestra piel en un primer contacto con el sol no va a estar preparada y será mucho más sensible a las radiaciones UV.

Durante la primavera, además habrá cambios mucho más bruscos de temperatura, provocando que nuestra piel se deshidrate. Contra.

Con la floración, aparecen los primeros signos de alergia al polen dando lugar al empeoramiento de algunas enfermedades como la psoriasis, sequedad o irritaciones. Contra.

Además, puede ocurrir que al cambiar la dieta (generalmente nos apetecen muchas más frutas y verduras) también produzcan cambios sobre nuestra piel mejorando su hidratación y luminosidad. PRO.
Hace mejor tiempo por lo que hacemos más ejercicio. PRO.

En QUINQUE recomendamos una serie de tips que nos ayudan a cuidar la piel en primavera, y a sufrir menos los efectos que acompañan a este periodo. Cuidar la piel durante la primavera implica adaptar la rutina a una serie de necesidades específicas.

Nuestros consejos:

Limpieza diaria l: es muy importante limpiar nuestra piel todos los días, para eliminar los restos de sudor y de suciedad que se acumulan.
Hidratación: a medida que aumenta la temperatura y humedad, es muy importante que nuestra piel se mantenga hidratada para que no tenga un exceso de sequedad debido a los cambios bruscos de la primavera y en consecuencia una producción de sebo compensatoria.
Uso diario de protección solar, ya que como las temperaturas irán aumentando poco a poco la radiación solar también, por lo que será mucho más fácil quemarnos.
También, es muy importante seguir una dieta rica en frutas y verduras, ya que debemos ingerir vitaminas, minerales y antioxidantes.
Beber abundante agua.
Hacer ejercicio, ya que este tiene beneficios súper importantes para la piel, estimulando la liberación de hormonas que ayudarán a mantener el equilibrio de la barrera natural de la piel.